Reid Blackman, fundador y CEO de la consultora de ética Virtue, nos comparte su reflexión mencionando que “Si bien puede ser comprensible que los líderes piensen que necesitan monitorear el trabajo de sus empleados, deben sopesar cuidadosamente todos los factores antes de tomar esa decisión”

Deberían las empresas monitorear a sus empleados?

Derivado de lo anterior, Blackman define estos 6 consejos

I. Elija sus métricas con cuidado al involucrar a todas las partes interesadas relevantes. En lugar de emitir juicios basados en puntajes numéricos generados por el software, asegúrese de que lo que está rastreando sea relevante para la productividad, la eficiencia y los ingresos de su organización. Consulte con sus partes interesadas para determinar cuáles son las mejores métricas.

II Sea transparente con sus empleados sobre lo que está monitoreando y por qué. Comparta los resultados de su seguimiento con los empleados y permítales proporcionar comentarios. Eso puede aumentar su aceptación.

III. Ofrézcales reconocimiento. Utilice el monitoreo para ayudar a los empleados a aumentar la productividad o para recompensarlos por un trabajo bien hecho, en lugar de como un medio de castigo.

V. Acepte que los trabajadores muy buenos no siempre podrán hacer un buen trabajo todo el tiempo, especialmente a la luz de los desafíos provocados por la pandemia. En estos tiempos difíciles, no decida quién es un buen empleado o un gran trabajador en función del desempeño actual. Los factores externos, como la educación en el hogar o el cuidado de un miembro de la familia, pueden jugar un papel importante en el desempeño de los empleados.

  1. Supervise sus propios sistemas para asegurarse de que las personas de color y otros

grupos no se vean afectados de manera desproporcionada. Es mejor implementar una política para monitorear a todos los empleados en lugar de a ciertos. La aplicación de políticas evita igualmente la discriminación. Y tenga cuidado de no monitorear desproporcionadamente a los que ocupan puestos menores, lo que podría afectar los esfuerzos de diversidad.

  1. Disminuya el seguimiento cuando y donde pueda. Reducir el monitoreo en áreas donde las cosas van bien, lo que ayuda a indicar que la organización confía en los empleados.

Fuente: Harvard Business Review